These are moments of reflection, of evaluating and channeling what we want or don’t want – this is how I am feeling in the closed space in which I find myself.

I reflect my personal life and I feel very lucky to have my family and friends. About my professional life, that life that I am passionate about and that froze overnight. I do not feel that it has been taken from me because in my mind it is still present every day, new projects for when all this is over, thinking about reinventing myself and above all not standing idly by watching life go by, is what is helping me.

I value every minute of rest, every second I breathe because that is reason to keep going when all this is over. I spend time with my family, a family that for work reasons I do not see enough of and they are where I focus almost all of my energy.

I channel the low moments, of disappointment, of problems that arise when trying to continue with your future career, in the best way that I can, giving importance to each thing.

These three words are what are enabling me to continue fighting for what I love – DANCING. Many days I get up and think about what I would be doing at that moment (in the theatre, companies, projects) and I am disappointed, but the second I say it cannot be, this is what you are experiencing now and tomorrow will be something else.

For flamenco and the arts in general it is complicated – since we are one of the sectors most affected by the health crisis, what awaits us is hope, uncertainty, struggle, but I am convinced that we will be back with even more strength and courage.

For us it is not a novelty to have to look out for our livelyhoods, to have to manage ourselves, that is our normal day to day concern, and now it will be different, as the Flamenco union lawyer said the other day – we are used to cooking chickpeas, not cultivating them!

What I do feel is more respect, union and empathy, for society and, most importantly, for the flamenco profession, that at this time we are all together in the same situation and there are always opportunities.

To finish I would like us to have more respect for how we live and where we live, that we do not just look at our navel, that we shake hands with our neighbours, that the ego is not our greatest rival, that we enjoy every second and that this situation makes us open our eyes to the world.

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Son momentos de reflexión, de valorar y canalizar lo que queremos o no, así es como me estoy sintiendo en el espacio cerrado en el que me encuentro.

Reflexiono sobre la vida personal y me siento muy afortunado de tener a mi familia y amigos. Sobre mi vida profesional, esa vida que me apasiona y que de un día a otro se congeló. No siento que me lo hayan quitado porque en mi mente sigue presente todos los días, nuevos proyectos para cuando acabe todo esto, pensar en reinventarme y sobre todo no quedarme de brazos cruzados viendo la vida pasar, es lo que me esta ayudando.

Valoro cada minuto de reposo, cada segundo que respiro porque eso es razón para seguir hacia delante cuando acabe todo esto. Me encuentro con mi familia, familia que por motivos laborales no disfruto todo lo que me gustaría y en ellos es donde centro casi toda mi energía.

Canalizo los momentos bajos, de decepción, de problemas que surgen al intentar seguir con tu futuro, de la mejor manera que puedo, dandole la importancia que se merece cada cosa.

Estas tres palabras son las que me están llevando seguir luchando por lo que amo, BAILAR. Muchos días me levanto y pienso en lo que estaría haciendo en ese momento (en el teatro, compañías, proyectos) y me desilusiono, pero al segundo digo no puede ser, esto es lo que estás viviendo ahora y mañana será otra cosa.

Para el flamenco y la cultura está siendo mas complicado ya que somos uno de los sectores más castigados por la crisis sanitaria, lo que nos espera es esperanza, incertidumbre, lucha, pero estoy convencido de que vamos a estar con mucha más fuerza y valentía.

Para nosotros no es una novedad tener que buscarnos la vida, tener que administrarnos, eso es nuestro día a día, y esta vez va a ser así, como dijo el otro día el abogado de unión flamenca “ estáis acostumbrados a buscaros los garbanzos, no a cultivarlos”. Lo que si siento es más respeto, unión y empatía, por la sociedad y, lo mas importante, por la profesión, que esta vez estamos todos juntos en la misma situación y aunque siempre hay oportunidades y oportunistas si que siento mas respeto por las formas de hacerse.

Para acabar me gustaría que tuviésemos mas respeto por lo que vivimos y donde, que no nos miremos solo nuestro ombligo, que demos la mano al que tenemos a nuestro lado, que el ego no sea nuestro mayor rival, que disfrutemos de cada segundo y que esta situación nos haga abrir los ojos ante el mundo.